Iniesta marca la diferencia
Último
partido de preparación de la selección española antes de partir a Polonia para
disputar la Eurocopa. En esta ocasión el rival no fue otro que la China de José
Antonio Camacho, quién le daba el aliciente especial al encuentro al
enfrentarse a “su” selección.
No
fue el encuentro el monólogo esperado, en parte por voluntad del combinado
español, que se empeñó en dar alas a su rival gracias a una preocupante
fragilidad defensiva, así como una falta de concentración inusual en el centro
del campo. Poco tardaron en avisar los chinos con una ocasión de su capitán
Zheng Zhi, que tras una pérdida de Xabi Alonso, dribló a Casillas, pero después
se entretuvo demasiado y echó el balón fuera ante la nube de piernas españolas.
Pero España no pareció escarmentar con la ocasión perdida por el cuadro
asiático y continuó en el limbo durante toda la primera mitad. Estuvo mal
Arbeloa, que fue un mero espectador ante las contras chinas; mal Ramos, muy
despistado y con despejes peligrosos que pudieron costarle algún que otro susto
al equipo de Del Bosque; y regular Albiol y Alba: al primero se le vieron las
carencias cuando se vio desbordado por la desconcentración de Ramos y Arbeloa; el
segundo demostró que no es un lateral fuerte defensivamente, pero le salvó su
aportación ofensiva. El punto cumbre del desajuste defensivo español lo marcó a
la media hora de juego un paradón a bocajarro Casillas, que sacó con el pie un
remate Zhi tras un centro desde la izquierda en la enésima contra china por ese
costado.
Pero
no todo iba a ser malas sensaciones para el equipo español. También tuvo sus
ratos buenos en la primera mitad. Pocos, pero los tuvo. Y en todos ellos hubo
un denominador común: la presencia de Silva y Cazorla. El canario exhibió toda
la magia que lleva en sus botas a base de pases maestros, regates y disparos
que trajeron de cabeza a la defensa china. El asturiano también mostró su mejor
versión y abrió una autopista por la izquierda a Alba, que entró continuamente
creando mucho peligro. De hecho, fruto de una combinación entre ambos, llegó la
ocasión más clara para España en la primera parte, con un posterior remate de
Negredo que se marchó muy desviado. Es preocupante la falta de puntería de la
Campeona de Europa y del Mundo.
En
la segunda mitad, Del Bosque mostró un equipo nuevo prácticamente, con la
entrada de Valdés, Navas, Iniesta y Torres en detrimento de Casillas, Busquets,
Xavi y Negredo, y España mejoró notablemente. Se buscó a Torres sin mucha
fortuna, ya que aunque el “Niño” estuvo mejor que Negredo, tampoco mejoró el
problema de anotación de la Selección. También es verdad que sus acompañantes
no fueron los que tuvo el sevillista en la primera mitad, porque la presencia
de Iniesta se nota y mucho. El manchego lo hizo todo en el campo: se asoció a
la perfección con Silva, distribuyó el juego como si de un creador se tratase,
dribló con magia, y nos dejó una jugada genial para el recuerdo al controlar un
complicado balón en el área china, sentar a tres rivales y mandar su disparo al
larguero como hubiera hecho Albiol pocos minutos antes. Pero sin duda, Iniesta
aportó un plus, ese plus que hace a la Roja ser la mejor del Mundo, ese plus
que se vio patente en la jugada del tanto de Silva, en la que se metió hasta
línea de fondo dejando atrás a los jugadores de Camacho con suma facilidad para
servirle en bandeja el tanto de la victoria a Silva y mostrar el camino a una
España que afronta en pocos días el reto entrar en la Historia al lograr lo
nunca nadie a conseguido: Eurocopa, Mundial y Eurocopa.
ALINEACIONES
España: Casillas (45’ Valdés); Arbeloa,
Albiol, Ramos (56’ Piqué), Alba; Busquets (45’ Iniesta, Alonso, Xavi (45’
Navas), Cazorla (67’ Mata), Silva; Negredo (45’ Torres).
China: Cheng; Linpeng, Xiaoting,
Peng, Xiang; Xuri (70’ Lu Peng), Sheng (64’ Jange), Junming (60’ Wang), Hai
(74’ Zheng), Zhi (64’ Jian); Lin (87’ Dabao).
PabloG.
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