Rusia vence y convence
Debutaban Rusia y la República checa en la UEFA Euro 2012 de
Polonia y Ucrania con el objetivo de alzarse con la primera posición del Grupo
A, tras el empate a uno que firmaron Polonia y Grecia en el partido inaugural
de la competición.
Comenzaron descarados los checos, sometiendo a los chicos de
Advocaat con un juego vistoso. Pero pronto demostró Arshavin que cuando se pone
la camiseta de la selección rusa pasa de ser ese buen futbolista que no termino
de cuajar en el Arsenal a convertirse en la estrella mundial que deslumbró en
la Eurocopa de Austria y Suiza y, arrancando desde la banda, dirigió todo el juego
ofensivo de su equipo. Eso sí, el capitán ruso no estuvo sólo en la labor,
contó con la inestimable ayuda de sus compañeros Kerzhakov y Dzagoev, decisivo
en el día de hoy. De hecho, entre los dos fabricaron el primer tanto del
encuentro, cuando Kerzhakov remató al poste de cabeza un centro desde la
derecha de Zyryanov, lo que el mediapunta del CSKA aprovechó para empujar al
fondo de las mallas.
Tras el gol, Rusia se armó de moral, mientras que los checos
se quedaron bastante “groggy”, hecho que aprovechó Shirokov para iniciar una
contra que al pasar por los pies de Arshavin se tornó en letal cuando el diez
filtró un pase perfecto al que no llegó Kerzhakov, pero que el propio Shirokov
transformó en un sutil toque picado que hizo inútil la salida de Cech y que
dejaba el partido tocado de muerte. Pudieron ampliar su ventaja los de
Advocaat, pero a pesar del gran trabajo de desgaste realizado por Kerzhakov, la
puntería no acompañó al ex sevillista.
En la segunda parte, los hombres de Bilek lavaron un poco su
imagen y volvieron a ser los que arrinconaron a
Rusia en los primeros compases del encuentro. Fruto de ello, llegó un
pase maestro de Plasil que vio el desmarque de Pilar para que el extremo checo
sentara a Malafeev y recortara distancias. Rusia lo pasó mal durante algunos
minutos, pero después se levantó y demostró que lo de su rival era un
espejismo. Buena culpa de ello la tuvo Pavlyuchenko, que entró por Kerzhakov a falta dieciocho minutos para
el final y que tan sólo necesitó ocho para liarla. Primero con un preciso pase
al hueco para Dzagoev que el talentoso mediapunta no desaprovechó ante Petr Cech;
después con un eslalon sensacional en el que se burló de tres rivales
arrancando desde el pico del área y que terminó con un zapatazo con la pierna
derecha que restalló en la escuadra. Y es que Rusia venció y convenció con un
buen juego basado en los pilares fundamentales del equipo que asombró a Europa
hace cuatro años como Arshavin o Pavlyuchenko, a los que se sumaron grandes
talentos como Dzagoev, para presentar su candidatura, al menos a incordiar a
los favoritos.
ALINEACIONES
Rusia: Malafeev; Anyukov, Berezoutski, Ignashevich, Zhirkov;
Shirokov, Denisov, Zyryanov; Dzagoev (84’ Kokorin), Arshavin, Kerzhakov (73’
Pavlyuchenko).
República Checa: Cech; Selassie, Hubnik, Sivok, Kadlec;
Plasil, Jiracek (75’ Petrzela), Rezek (45’ Hübschmann), Rosicky, Pilar; Baros
(85’ Lafata).
PabloG.
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